Para la Corporación es muy importante aclararle a la comunidad atlanticense, que el Parque Isla Salamanca no está ubicado en jurisdicción de esta entidad, toda vez que éste hace parte del departamento del Magdalena. Así mismo dicho territorio hace parte del Sistema Nacional de Áreas Protegidas, por lo que Parques Nacionales en conjunto con Corpamag, son las autoridades competentes para intervenir en la problemática que se viene presentando en dicha zona.

La CRA, en virtud del principio de colaboración que persiguen las entidades públicas ha apoyado en distintas ocasiones a las autoridades competentes para dar una solución adecuada a la problemática que se viene presentando.

En este sentido, el director de esta entidad, Alberto Escolar ha señalado que “Estamos esperando que se revise la reasignación y delegación de las competencias sobre el Parque Isla Salamanca”, tras el anuncio del Presidente Juan Manuel Santos de solicitar al Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible otorgar a esta Corporación competencias en el manejo del Parque.

“Hemos estado atentos a lo que está ocurriendo en la Isla Salamanca, participando en el tema de acción y prevención de la situación y hemos sido siempre los primeros en alertar a los funcionarios de Parques Nacionales, para que adopten medidas en lo que les corresponde, sin tener en cuenta que por jurisdicción no es nuestra competencia”, explicó Escolar.

El funcionario dijo que la labor que se viene haciendo por parte de las autoridades policivas ha sido fundamental para evitar que la situación empeore, pero que se hace necesario fortalecer la atención de problemas sociales que existen en el entorno del Parque, agregando que es importante que la ciudad de Barranquilla y el departamento del Atlántico se involucren en la administración y manejo de la problemática y que exista una formalización de esa participación, toda vez que se sale del resorte de las autoridades locales.

En este sentido el director de la CRA, Alberto Escolar propone un plan de acción con metas corto plazo, que incluye tres componentes fundamentales: Primero, fortalecer la presencia de la Fuerza Pública, para ejercer control y vigilancia, como son la Armada Nacional, la Policía Ambiental y el Ejército Nacional, que deben brindar un acompañamiento permanente en la zona.

Segundo, promover un desarrollo productivo, a través de estrategias para desestimular el uso irracional de los recursos naturales del Parque, que están generando los incendios. Desde la autoridad ambiental se puede liderar proyectos que contribuyan a reducir los índices de deterioro de esta importante reserva del Caribe. “Eso se haría con inversión, alianzas estratégicas con actores que tengan vínculo con el Parque, a través de un proceso de articulación de acciones que permitan generar y garantizar proyectos sostenibles, que de alguna manera reduzcan la incidencia de actividades ilícitas al interior del parque”, explicó

Tercero, Escolar propone una vinculación más estrecha entre la ciudad de Barranquilla y el departamento del Atlántico con todo lo que tiene que ver con los servicios ecosistémico que presta el Parque Salamanca. “Sería muy interesante que desde todos los sectores como la academia, el sector económico y el institucional, se comience a mirar esta zona como parte importante de nuestro territorio, debido todos los servicios que recibimos de allí y fomentar actividades de ecoturismo, siendo conscientes de que es un privilegio tenerlo al lado, que es una fábrica de oxígeno para nuestra región y es nuestro deber es ayudar a conservarla”.

Para Escolar, es comprensible el descontento y las críticas que ha generado el manejo de este tema, pero reitera que hay una situación jurídica de fondo, como es la división territorial y jurisdiccional del país, que delimita fronteras para la ejecución de estrategias de inversión, control y vigilancia. Además, señaló que “desafortunamente la estructura funcional del estado se basa en esa delimitación de competencias y jurisdicciones, que no se puede violar sin que exista un mecanismo previo para definirlo, nosotros vivimos en el límite y la estructura del estado impide que ejerzamos funciones en la otra orilla del Río Magdalena”.

“La gente tiene que entender que así como el Parque nos ofrece una inmensa riqueza, tanto desde el punto de vista de generación de oxígeno, como paisajístico y todo lo que nos ofrece como tesoro natural, también, hay que generar conciencia y adquirir compromisos para volver a mirar no solo al río, sino igualmente al Parque Isla Salamanca para contribuir con ese bien y avanzar en un proceso de acercamiento entre la ciudad y este importante ecosistema”, puntualizó Escolar.