Financiación de áreas protegidas regionales, una prioridad para el Pacto Histórico
Bancada del Pacto Histórico reafirma su compromiso con la financiación de las áreas protegidas regionales y municipales del Caribe colombiano.
Región Caribe: En el Primer Dialogo Regional del Caribe convocado por la Bancada del Pacto Histórico, que se llevó a cabo en Santa Marta, representantes a la Cámara y del Senado del Pacto se dieron cita con los ministros designados con el fin de generar sinergias en este nuevo gobierno que arranca a partir del 7 de agosto.
Paralelo a este encuentro representantes de los diferentes sectores de la región, desarrollaron mesas de trabajo donde se identificaron los principales retos que se deben enfrentar en los ejes temáticos, como: economía productiva, cambio para el empleo y la productividad; economía para la vida; cambio por el medio ambiente; sociedad para la vida; cambio por la equidad; y democratización del Estado y paz: cambio por el Gobierno.
En la Mesa “Cambio por el Medio Ambiente” El Sistema de Áreas Protegidas del Caribe Colombiano - SIRAP Caribe, recalcó la importancia de los sistemas de áreas protegidas para recuperar la estructura ecológica de la región que hoy se encuentra altamente fragmentada, expuso tres grandes retos: La sostenibilidad de las áreas protegidas regionales que hoy ascienden a más 55 en el Caribe y que requieren de estrategias de comanejo y financiación para su administración. Otro de los retos, no menos importantes es la creación y formalización de corredores de conectividad biológica y sociocultural, vitales, para garantizar su estructura, composición y función de las áreas protegidas y por ende los servicios ecosistémicos que presta a las poblaciones y el desarrollo. Fortalecer la cadena de Valor del Ecoturísmo Comunitario, una actividad que bien desarrollada, se convierte en una estrategia para la conservación, el conocimiento y conciencia sobre la protección de las áreas protegidas y en una alternativa económica sostenible para las comunidades que desde sus saberes han contribuido a la conservación de estos relictos ecosistémicos.
Para el presidente del SIRAP Caribe, Jesús León Insignares, actual director de la Corporación Autónoma Regional del Atlántico C.R.A, uno de los grandes cambios que se esperan en la región es pasar de proyectos limitados de inversión para el manejo de las áreas protegidas regionales y municipales, a tener una fuente de financiación directa y permanente que permitan el desarrollo de actividades de vigilancia, monitoreo, protección, conservación, restauración y administración de las áreas protegidas que garanticen su manejo efectivo como lo establece la Política del SINAP.
Respondiendo al gran reto de la financiación de las áreas protegidas regionales, La Representante a la Cámara, María del Mar Pizarro del Pacto Histórico, responde al SIRAP Caribe que “La promesa de cambio es proteger nuestra biodiversidad, por tanto, queremos construir el Plan Nacional de Desarrollo con Ustedes. Tenemos en el congreso más de 12 representantes ambientales que se van a dar la lucha para que estas zonas se protejan y por primera vez y se designe presupuesto para estos temas. En cuanto a establecer una fuente de recursos, esperamos llegar a una realidad”.
Una de las metas que se requiere incluir en el Plan Nacional de Desarrollo según el experto en Áreas Protegidas y director de Alianza Para la Conservación y Desarrollo, Luis Calero, es el de aumentar la estructura ecológica principal en el Caribe Colombiano, “actualmente solo el 30% de la estructura natural se tiene protegida bajo alguna categoría o estrategia de conservación y uso sostenible, por ello se hace imperante aumentar este porcentaje a través de la implementación y sostenibilidad de los sistemas de áreas protegidas. Es la estrategia más acertada para que el territorio se planifique alrededor de los recursos naturales. El Caribe debe apuntarle a fomentar una cultura y compromiso de todos los sectores en reconocer respetar, y proteger los ecosistemas que hacen parte de la estructura ecológica.
La Región, cuenta con todo lo que se necesita para ser competitiva, cuenta con ecosistemas estratégicos protegidos que va desde páramos hasta inmensas áreas de corales, con comunidades pujantes y comprometidas en el desarrollo sostenible, y con esquemas de gobernanza, a través de sistemas de áreas protegidas que están naciendo y fortaleciéndose para garantizar la conectividad de la estructura ecológica principal y el recurso hídrico del territorio.