Completamente cerrado quedó el caño San Antonio, que conduce la salida del agua desde el embalse El Guájaro hacia el canal del Dique, controlando así la filtración que se venía presentando como consecuencia del hurto de las estructuras que componen las compuertas, por parte de personas indeterminadas. Luego de este cierre, se iniciará el mantenimiento correctivo a las compuertas en terreno seco.

El procedimiento fue complejo y duró diez días, debido a que normalmente, cuando se hacen los cierre periódicos, se contaba con las seis estructuras completas; mientras este año se debió realizar el proceso con la novedad del  hurto de dos estructuras y por ello la presión del agua era demasiado alta, dificultando las operaciones por parte del contratista, según explicó Jesús León Insignares, director de la Corporación Autónoma Regional del Atlántico C.R.A.

León Insignares, confirmó que las maniobras de cierre total comenzaron en la tarde de ayer sábado y finalizaron hoy domingo hacia el mediodía, indicando que técnicamente lo que se hizo fue obstaculizar el paso de agua mediante la colocación de dos estructuras de acero, de 1/2 pulgada de 6,09 m x 2,44 m, con un peso de casi dos toneladas cada una, ubicadas en la entrada del box culvert de las compuertas y posteriormente se cerró, de manera provisional, con un dique en el canal que va hacia la infraestructura.

El directivo dio un parte de tranquilidad con respecto a la preocupación de los pescadores y comunidad asentada en los alrededores de las compuertas, quienes temen que por la sequía de la temporada se agote el recurso hídrico, afectando sus actividades, al argumentar que el Guájaro hasta este sábado 20 de febrero, mantuvo una cota de 4.42, siendo el nivel más alto desde el año 2012, por lo que no debe existir alarma, teniendo en cuenta  que en los últimos años, solo en el año 2013 estuvo por encima de los niveles actuales y considerando que en ese momento se tenía como antecedente el Fenómeno de la Niña 2010-2011.

Por otro lado, la C.R.A, iniciará la evaluación de los daños que han venido sufriendo estas estructuras, por la manipulación indebida que realiza un cierto número de personas de la zona, agregando que “En un análisis preliminar evidenciamos que fueron robados los rieles,  guías, compuertas, entre otros elementos que se están identificando”, precisó León.

Recordó que la semana pasada ya se habían controlado filtraciones en las compuertas El Porvenir y se están desarrollando trabajos de limpieza y adecuación de los  muros, mientras que ahora se continuará con el mantenimiento correctivo en las de Villa Rosa, mencionando que una de las prioridades será el acondicionamiento de la infraestructura para que el personal militar pueda desempeñar su labor de manera segura, lo que permitirá a la autoridad ambiental, operar el sistema apegado al manual, garantizando el recurso hídrico para las actividades productivas que dependen de este cuerpo de agua.

La Corporación, en un trabajo articulado con la Gobernación del Atlántico, el Ejército Nacional y la Policía Nacional, ha puesto en marcha múltiples  estrategias para evitar que las personas sin autorización manipulen el sistema de compuertas.