La Corporación Autónoma Regional del Atlántico, emite una alerta ante la posibilidad de presentarse mortandad de peces en los cuerpos de agua del departamento debido a las condiciones climáticas que se vienen afrontado, y sumado al aumento de la velocidad del viento podría ocasionar la muerte de algunos individuos por condiciones naturales.

Según la Bióloga Ayari Rojano, la situación es natural y se presenta en todos los humedales del Caribe colombiano para la misma época, explicando que se debe tener en cuenta que además de la resuspensión de los sedimentos que contienen materia orgánica, se encuentra gran cantidad de vegetación en las orilla están sumergidas y en descomposición, incrementando los niveles de materia orgánica así como el follaje del manglar que está soltando las hojas como respuesta al inicio del periodo seco más lo acumulado en años.

La experta añade que la época de sequía se caracteriza no solo por la ausencia de lluvias, sino también, por el aumento de la evaporación y evapotranspiración de los cuerpos de agua, así como la desconexión de los humedales de las fuentes principales como el Rio Magdalena y el Canal del Dique, lo que genera la concentración de contaminantes en el agua. Señaló que “el aumento de las poblaciones naturales de algunas especies que generan una alta productividad y alta competencia por alimentación y oxigeno podría generar la mortandad peces en algunos cuerpos de agua”.

Por otro lado, el Servicio Meteorológico Marino del Caribe CIOH reportó que actualmente, persiste una diferencia de gradiente de presión sobre la cuenca del Mar Caribe colombiano debido a la interacción entre un sistema de alta presión (1022 mbar), localizado al noreste de las Antillas Mayores, y un sistema de baja presión (1008 mbar) ubicado sobre el centro del litoral Caribe colombiano.

La anterior mantiene vientos de dirección este-noreste en la mayor parte del territorio marítimo, oscilando entre 22 y 29 nudos, y una altura de ola significativa que varía entre 2.8 y 3.5 metros que en los dos últimos días los vientos en el Mar Caribe alcanzaron los 20 a 30 nudos, lo que equivale a entre (37 – 46,3 kilómetros por hora), con posibilidad de ráfagas superiores, lo que ha ocasionado olas en los sistemas cenagosos cercanos de aproximadamente 30-40 cm de altura en cuerpos de agua que normalmente no presentan oleaje y que han ocasionado una resuspensión de los sedimentos no consolidados.

Por lo anterior, se hace un llamado a los pescadores y comunidad en general, quienes tienen contacto permanente con los cuerpos de agua para que reporten ante la Autoridad Ambiental cualquier anomalía que se presente o si observan la presencia de peces boqueando en la superficie o muertos en las orillas de manera que la Corporación pueda tomar las medidas necesarias ante esta situación.