· La inversión asciende a 20 mil millones  de pesos y se benefician 250.000 habitantes.

· Los trabajos hacen parte del proyecto que ejecuta la CORPORACION AUTONOMA REGIONAL DEL ATLANTICO C.R.A, en convenio con el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible

 

La construcción del Embalse del Guajaro por el Instituto Colombiano de la Reforma Agraria (INCORA), entre los años 1964 y 1965, fue la respuesta dada por el Estado a las repetidas y cíclicas inundaciones  generadas por el Río Magdalena y su derivación del Canal del Dique, lo que hacía inviable la producción agrícola y pesquera en el centro y sur del Departamento del Atlántico. Es la unión artificial de las ciénagas Limpia, Ahuyama, cabildo, Playón de Hacha, La Celosa y El Guajaro.

 

Se concibió como solución integral enmarcada en el PROYECTO ATLANTICO 3, que buscaba reactivar la producción agrícola del departamento  a través de la rehabilitación de  40.000 hectáreas mediante la construcción de 3 distritos de riego en los municipios de Repelón, Santa Lucia y  Manatí. De este proceso constructivo solamente se entregaron y parcialmente los distritos de Repelón y Santa Lucia y se abandonó la construcción del distrito de Manatí.

 

En sus inicios representaba un cuerpo de agua de 16 mil hectáreas. En las últimas décadas, según datos de la CORPORACION AUTONOMA REGIONAL DEL ATLANTICO CRA, ha perdido por lo menos 4 mil hectáreas y la casi totalidad de sus rondas naturales.  Aun así  se constituye en la principal fuente de trabajo para los habitantes de La Peña y Aguada de Pablo, corregimientos de Sabanalarga.

 

 

La vulnerabilidad de estas poblaciones ante eventos de precipitación extremas sigue traduciéndose en inundaciones como hace cincuenta años. Por eso cuando la CORPORACION AUTONOMA REGIONAL DEL ATLANTICO CRA, dio a conocer el inicio del proyecto que determinaría el diseño de las estructuras y sistemas necesarios para garantizar la sostenibilidad del Embalse y  frenar la invasión de las áreas perimetrales el escepticismo se hizo notar.

Sin embargo, hoy la autoridad ambiental del departamento avanza en un 90% en las obras de construcción de cerca de 2 km el muro de contención para reducir los riesgos de los habitantes aledaños al espejo de agua. La inversión asciende a 20 mil millones  de pesos. Los trabajos hacen parte del proyecto que ejecuta la CORPORACION AUTONOMA REGIONAL DEL ATLANTICO, C.R.A en convenio con el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, para proteger el ecosistema estratégico de la cuenca hidrográfica del embalse frente a impactos  generados por el cambio climático.

 

ADALBERTO SARMIENTO SARMIENTO nacido, bautizado y criado en el Corregimiento de La Peña y socio de la Cooperativa Agropecuaria Protectora de los Recursos Naturales de la Peña –Coaperpe, dejó su timidez a un lado cuando con voz firme aseguró que esta obra la estaban esperando toda la vida.

 

“Nosotros veníamos solicitando desde hace mucho tiempo que se desarrollaran trabajos de esta naturaleza que se tradujeran en beneficios concretos. Nuestras comunidades esperan que el tema de las inundaciones sea cosa del pasado. Además creemos que el embalse va alcanzar gran relevancia ecoturística”, manifestó esperanzado. 

 

Destacó que desde que la CRA se apersonó del  manejo de compuertas y todo el control del embalse la situación ha vendió mejorando. “La verdad es que se hicieron unos estudios serios con la Universidad del Magdalena y las recomendaciones de ese estudio son las que hoy se están llevando a cabo. Otras veces se hicieron estudios pero nunca se materializaron en obras. Con el concurso de la CRA y la ayuda de Dios vamos a seguir adelante”.

 

ARNOLDO JOSE CANTILLO AHUMADA, director de la emisora  comunitaria  ECOS DEL GUAJARO, reproduce en esta estación radial el optimismo de su paisano ADALBERTO, cuando afirma que el muro se constituye en el escenario apropiado para generar nuevas fuentes de ingreso para sus familias.

 

“Deseamos tener modos de vida distintos. Nos anima que con la vocación turística de la obra se robustezca el presupuesto de las familias que tanto nos hace falta”

 

 

“Las comunidades no solo adquirieron protección para sus viviendas, sino que además éstas se valorizaron y serán el centro privilegiado para el desarrollo de futuros proyectos turísticos y sociales. Esta obra también  se ha convertido en el eje central de movilidad para trasladarse a cualquier punto del corregimiento” fueron las palabras de DAIRO OLMOS JULIO, un humilde llantero que antes fue pescador.

 

 

El proyecto, que beneficia a 250.000 habitantes, también incluye las reparaciones de las Compuertas Villa Rosa y Porvenir, ubicadas en Repelón, logrando que el proceso de oxigenación del embalse aumentara al disminuir la carga de material contaminante en la zona de descargue del cuerpo de agua. Se hizo retiro  del sedimento de los caños que alimentan el sector del Porvenir y su posterior disposición en zona externa del cuerpo de agua.

 

Con el buen manejo de las compuertas que comunican el embalse con el Canal del Dique, se ha logrado garantizar la cantidad y calidad del recurso hídrico para las comunidades que se abastecen del Guajaro. Lo anterior, gracias a la inversión que la Corporación realizó en ajustar el manual de operaciones de las compuertas El Porvenir y Villa Rosa que vienen siendo administradas por la Entidad desde el año 2000 y que no respondían a las necesidades actuales del territorio, teniendo en cuenta que no se ajustaban a los fenómenos de variabilidad climática a los que hoy en día se enfrenta el Departamento del Atlántico.