Corporación Autónoma Regional del Atlántico
Por un Ambiente sin Fronteras CRA AVANZA EN ESTUDIOS SOBRE IMPACTO DE AMENAZAS NATURALES EN EL LITORAL ATLÁNTICO
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- *Aumento del nivel del mar, disminución de la presencia de aves
migratorias y malas prácticas de habitantes de la zona costera son las
mayores problemáticas que presenta la zona.*
La Corporación Autónoma Regional del Atlántico, CRA avanza en estudios de
la franja costera, como insumos principal para el ordenamiento territorial
de cada municipio de la zona, del ordenamiento costero productivo y del
ordenamiento ambiental de la Unidad Ambiental Costera UAC Río Magdalena.
Así lo expresó Alberto Escolar, director de la CRA , al liderar este
proceso, que será trascendental para la toma de decisiones sobre la franja
costera, permitiendo así una efectiva gestión no sólo del departamento,
sino que será un aporte en armonía con los demás territorios de la UAC Río
Magdalena.
Los estudios han sido socializados con los diferentes actores sociales e
institucionales involucradas en el proceso de formulación del Plan de
Ordenación y Manejo de la Unidad Ambiental Costera UAC del Río Magdalena,
como parte de los resultados de la segunda fase del proyecto en el área del
litoral del departamento del Atlántico, así como el análisis de detalle en
la franja crítica que va desde la desembocadura del río hasta la flecha de
Puerto Velero.
Como resultados dentro de la evaluación del Impacto de Amenazas Naturales
de Origen Marino en el Litoral del Departamento del Atlántico y algunos
Aspectos de la Dinámica Oceanográfica , se destacan conclusiones
importantes en relación con el ascenso del nivel medio del mar, debido al
cambio climático, al encontrarse que la tasa de incremento del nivel del
mar en el largo plazo para la zona del Caribe central colombiano fue de
5.075 mm/año.
Lo anterior, implica que en un período de 25 años el nivel medio del mar se
habrá incrementado en aproximadamente 0.13 metros . En 50 años se habrá
incrementado 0.26 metros , en 100 años se habrá incrementado 0.52 metros y
en 200 años se habrá incrementado aproximadamente 1.04 metros . Estas
fueron algunas de las preocupaciones expresadas por el docente investigador
Luis Otero, quien hizo parte de esta fase.
También abarcó otros aspectos, como el impacto de Tsunamis, que según
Otero, quien hizo parte de esta fase, aunque sea un tema que pareciera
lejano al plano local, debe comenzarse a estudiar y prevenir, debido a que
en el litoral del Atlántico, algunas las zonas se afectarían ante a un
eventual tsunami, como son Galerazamba y Santa Verónica, con alturas de más
de dos metros y la zona de Salgar, se vería impactada de forma
significativa debido a un Tsunami, con alturas supriores a 1.5 metros .
Otero fue enfático en aclarar que esto no debe alarmar a la ciudadanía,
pero si debe despertar la atención tanto de las autoridades ambientales
como de los entes territoriales para comenzar a trabajar en la preparación
de sus territorios y comunidades.
En el marco del estudio se presentó a detalle la presencia de aves
migratorias y presentes en cada zona de la franja costera del Atlántico, y
su disminución producto de la tala del manglar y la desaparición de cuerpos
de agua importantes en el área. También se señalan un buen número de las
malas prácticas de los habitantes costeros y los caseteros, en la
destrucción del manglar, por ejemplo la elaboración de los kioscos playeros
y enramadas con manglar talado, o la quema de manglar para uso de leña.
Por su parte, la Priscila Celedón , Director a del proyecto en la fase II,
dio a conocer algunas recomendaciones de la primera fase, entre las que se
destacan la necesidad de comenzar a diseñar dinámicas de adaptación al
Cambio climático entre autoridades y comunidades, sensibilizar en el
reconocimiento de comunidades y autoridades sobre la necesidad de cambiar
prácticas en el habitar de la franja costera, armonizar usos de suelo con
las proyecciones de los estudios geofísicos y oceanográficos, pero sobre
todo, promover el cumplimiento de los aspectos ambientales y de gestión de
riesgos en los POTs y proyectos de desarrollo local.
Cabe anotar que las Unidades Ambientales Costeras AUCs, sirven como
instrumento técnico de apoyo a las administraciones locales para
desarrollar políticas sobre seguridad territorial e implementación de
programas y proyectos turísticos, productivos, armonizando el ambiente con
las directrices de desarrollo socio productivo.
*Cómo nace la AUC Río Magdalena*
Las UACs se rigen por el decreto 1120 de 2013 y que específicamente, en la
UAC Río Magdalena existe un área de la zona costera definida
geográficamente para su ordenación, que comprende el complejo canal del
Dique y el sistema lagunar desde la ciénaga de Santa Marta.
En este sentido, a partir del artículo 208 de la ley 1450 de 2011, las
Corporaciones Autónomas Regionales tienen incidencia en las áreas costeras,
competencias que anteriormente, sólo estaban bajo responsabilidad de
instituciones como la Dirección Marítima DIMAR. Hacen parte de la UAC Río
Magdalena, el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Parques
Nacionales, Cardique, Carsucre, DAMAB, Corpamag, EPA (Establecimiento
Público Ambiental de Cartagena) y la CRA.
Esta Unidad Ambiental Costera, contiene ecosistemas con características
propias que interactúan en condiciones similares en cuanto a los aspectos
culturales, de conectividad vial, entre otros. Cuenta con cinco zonas
delimitadas geográficamente. Permite definir tipo de infraestructura vial,
conectividad costera y mejora las condiciones de habitabilidad en la zona
costera.
